Katie Price ha jurado amor "eterno" por tercera ocasión, pero esta vez lo hizo al stripper Kieran Hayler durante una ceremonia íntima en las Bahamas. En las imágenes que se han publicado sobre el festejo se puede observar que sólo seis personas estuvieron presentes.
La nueva unión de la modelo británica no es lo que ha causado controversia, sino el espectáculo que ofreció cuando lanzó su ramo de novia y ¡sorpresa!, sus senos quedaron al aire.
Importándole poco el vergonzoso momento, Katie simplemente acomodó sus atributos y siguió con el festejo como si nada hubiera pasado.